Hay muchas adaptaciones que han sido creadas con la ayuda de los autores que crearon esas historias y esos mundos. Adaptaciones en las que incluso muchas veces los autores son también los guionistas, como en Ventajas de ser Invisible y Gone Girl, o que tienen roles que les ayudan a formar parte constante del desarrollo de una adaptación.
Sin embargo, esto no siempre pasa.

Hay muchas novelas cuyos derechos han sido comprados por estudios para desarrollar una adaptación que nunca se toman la molestia de consultar a los autores o seguir sus consejos, y esto es posible porque muchas veces las condiciones en las que se compran los derechos no requieren que el autor tenga un rol activo en la adaptación, esto puede ser simplemente por tradición porque Hollywood así funciona o porque el autor no le interesa formar parte de la adaptación o por una mala negociación por parte del autor o alguna otra razón.
Esto lleva muchas veces a conflictos entre los autores y lo estudios, donde usualmente el autor acaba insatisfecho con la adaptación de su obra literaria y aquí les dejó algunos de estos casos:
Rick Riordan

El contracto que Rick Riordan firmó para vender los derechos de las novelas de Percy Jackson para que fueran adaptadas como películas no le daba control creativo ni privilegio alguno, una decisión que Riordan se arrepentiría eventualmente.
Aunque si hubo momentos en el que Riordan fue consultado y trató de dar consejos como “no modificar las edades de los personajes porque esto arruinaría la posibilidad de las secuelas”, la mayoría de sus consejos fueron ignorados y, al final, el autor quedo tan descontento con el guión de la primera película que lo describió como “terrible”.
Rick Riordan les dijo a los productores en unos emails que había varios cambios que no solamente hacían a la película completamente diferente al libro pero la hacía una terrible historia, y, eventualmente, Rick Riordan tomó la decisión de distanciarse lo más que pudo de las películas.
Pero parece que Rick Riordan aprendió de este error porque parece ser que tendrá un rol mucho más activo con la nueva adaptación que está siendo desarrollada para Disney Plus.
Jodi Picoult

Jodi Picoult ha dicho en varias ocasiones que los autores rara vez tienen un rol en las adaptaciones de sus novelas, que es como poner en adopción a un hijo y esperar que vaya a una buena familia pero hay veces que acabas decepcionado, como le pasó a ella con la adaptación de su novela My Sister’s Keeper.
El mayor problema que tuvo la autora fue con el final, el cual es completamente diferente al del libro. La autora menciona que el director Nick Cassavetes sabía que era muy importante para la historia (y para ella) que el final fuera el mismo, y que el director llegó a la misma conclusión después de leer la novela y estaba de acuerdo con Jodi Picoult.
Nick Cassavetes le dijo a la autora que ese era el único final de la historia y que no lo iba a cambiar, pero, en el caso de que lo hiciera, el personalmente le diría y le diría las razones.
Esto no sucedió.
Jodi Picoult trabajó con el director por un año escribiendo el guión. Sin embargo, un día se enteró del cambio del final porque un fan de la novela que trabajaba en una agencia de casting se lo dijo. La autora trató de ponerse en contacto con Nick Cassavetes; primero por teléfono, lo que concluyó con el director ignorando sus llamadas, y, más tarde, la autora fue al set de grabaciones y el director la echó. Jodi Picoult acabó poniéndose en contacto con los productores y les dijo que iban a perder dinero con la película, pero ellos respondieron que sabían lo que hacían
(Fuente)
Roald Dahl

Roald Dahl no tuvo los mismo conflictos que tuvieron los autores de arriba, pero es un autor que simplemente no le gustó la adaptación de 1990 de Las Brujas (The Witches) y criticó bastante el cambio del final, el cual modificaba completamente el mensaje de la historia.
Ademas, tampoco le gustaba la adaptación de 1971 de Willy Wonka y la Fábrica de Chocolates, aun cuando él escribió el primer borrador del guión de la película. Al parecer, Roald Dahl estaba muy insatisfecho con las pequeñas modificaciones que le hicieron a la historia, además de que no le interesaba la música ni estaba de acuerdo con la selección de Gene Wilder como Willy Wonka. El autor describió a la película como “horrible”, aunque, con el tiempo, la empezó a tolerar pero nunca le gustó.
P.L. Travers

No es un secreto que P.L Travers odiaba la adaptación de su novela Mary Poppins que hizo Disney en 1964.
De acuerdo a reportes, la autora lloró durante toda la proyección de estreno, y tampoco es un secreto que tuvo varios conflictos con Walt Disney sobre decisiones que se estaban tomando con respecto a la adaptación.
P.L Travers no estaba de acuerdo con que Mary Poppins fuera un musical, no le gustaba la animación y tampoco el embellecimiento del personaje principal. Además de que la autora le molestó mucho que sus sugerencias como consultora fueron en su mayoría ignoradas.
(Fuente)
Stephen King

Stephen King ha dicho en varias ocasiones lo descontento que esta con la adaptación de su novela El Resplandor que fue dirigida por Stanley Kubric y protagonizada por Jack Nicholson.
El autor ha descrito la película como “un Cadillac grande y hermoso sin motor dentro”. Una de las mayores quejas de King ha sido sobre la actuación de Jack Nicholson como Jack Torrance, ya que dice que el personaje no tiene desarrollo. El autor dice que Torrance en la película es un personaje que inicia ya loco y solo se vuelve más loco; mientras que en la novela es un hombre que está constantemente luchando por su cordura hasta que pierde, y esto hace que la historia sea una tragedia, no como en el caso de la película.
Stephen King aprendió algo sobre esta situación ya que ahora en día el autor tiene control sobre quienes son elegidos como director, guionista y elenco principal en las adaptaciones de sus novelas.
¿Qué otro autor conocen que tuviera problemas con las adaptaciones de sus novelas?
